Gran Canaria, un paraíso al alcance de todos
Gran Canaria es un vergel situado en medio del océano Atlántico que debe su sorprendente belleza a su origen volcánico. La variedad de su paisaje y la agradable temperatura durante todo el año le han convertido en un destino único en el que la playa y la naturaleza son simultáneamente sinónimo de diversión y descanso.
En una superficie reducida y marcada por una orografía llena de contrastes, la Isla emerge como un lugar ideal para escapar de la rutina gracias a su oferta cultural y de ocio, la amabilidad de su gente y el espíritu integrador de una capital abierta al mundo.
Pasión por la playa
La costa de Gran Canaria está adornada por 60 kilómetros de playas de arena rubia mayoritariamente accesibles y seguras para el baño. Las Dunas de Maspalomas es un enclave mágico para evadirse y renovar energía. El viajero que aprecie la intimidad está de enhorabuena porque la Isla oculta calas remotas en las que prima el silencio.
Un regalo de la naturaleza
El clima privilegiado del que goza Gran Canaria permite disfrutar de sus encantos naturales en cualquier época del año. Abruptos barrancos surcan la Isla desde las montañas, donde es posible practicar senderismo y otros deportes al aire libre. El Roque Nublo, un monolito emblemático, ofrece una panorámica impresionante: la culminación de una obra paisajista perfecta.
La Isla de las mil culturas
Gran Canaria lleva la multiculturalidad en sus genes como resultado de sus relaciones con Europa, África y América. La Isla rezuma Historia y un amplio catálogo de manifestaciones artísticas y arquitectónicas. La herencia de su pasado aborigen convive con un presente cosmopolita. El sello de su gastronomía también seducirá al visitante.