Guía para descubrir la gastronomía de la Provenza

La Provenza, con sus idílicos viñedos, los bulliciosos mercados gastronómicos de Aix-en-Provence y el exquisito pescado fresco de las aguas mediterráneas de Marsella, es un auténtico paraíso para los amantes del buen comer. A continuación, te presentamos siete restaurantes estupendos que no deberías perderte en tu próxima escapada a esta región francesa.

Este restaurante está situado en la preciosa Place Forum des Cardeurs y es una opción magnífica para los que viajan en familia. Cuenta con una de las cartas más variadas de la ciudad, que incluye desde jugosas hamburguesas hasta las tradicionales bandejas de quesos. Si vas a la hora de la cena, siéntate en una de las mesas exteriores bajo el cielo estrellado y déjate contagiar por el animado ambiente de la plaza.

Este moderno mercado gastronómico, que forma parte del proyecto de regeneración del frente marítimo, se ha convertido en uno de los lugares favoritos de los marselleses, y es fácil entender el porqué. Ve a la hora de la comida, coge un plato y elige manjares de prácticamente cualquier gastronomía que puedas imaginar. Degusta marisco fresco a un paso de la costa mediterránea, pídete una copa de rosado y ponle el broche de oro a la experiencia culinaria disfrutando de una deliciosa porción de tarta bajo el sol.

El Café Caumont, situado en una mansión provenzal renovada del siglo XVII que también acoge el museo Caumont Centre d’Art, derrocha sofisticación por los cuatro costados y es uno de los secretos mejor guardados de la ciudad. Este local conquista a los clientes con sus platos gourmet y con su cuidada estética. El papel pintado de cada salón nos traslada a diferentes eras históricas: viaja hasta la época de María Antonieta en un espacio decorado en rosa palo y lila, y caerás rendido ante el encanto de este café único.

Este restaurante de reciente apertura se encuentra adosado al elegante Hotel Mercure Canebière. Su ubicación privilegiada, en la principal avenida de la ciudad, lo convierte en un lugar perfecto para recargar las pilas después de una jornada explorando el cercano Puerto Viejo. Además, el local destaca por la maestría a la hora de elaborar los platos, la decoración interior, sencilla a la vez que moderna, sus simpáticos camareros y su ambiente acogedor. Acompaña la cena con una copa de tinto de su extensa carta de vinos y no te vayas sin probar sus deliciosos postres gourmet.

Este local, oculto en el Passage Agard, representa la quintaesencia de lo francés. Aléjate del bullicio de las calles cercanas, sube a la agradable terraza de la planta superior y siéntate para picar algo y degustar una merecida copa de vino. Los platos principales y las bandejas de quesos con una presentación inmejorable son perfectos para conocer los sabores de la Provenza. Antes de marcharte, echa un vistazo a la tienda de vinos, quesos y carnes de la planta inferior, y elige algún producto típico para llevar a tu familia o amigos. Este pequeño local, que enamora con su comida auténtica y su carácter rústico y acogedor, emula de maravilla la atmósfera de la ciudad de las mil fuentes.

Codéate con los lugareños en Paule et Kopa, uno de los mejores restaurantes de la ciudad. Se trata de un local cien por cien marsellés, situado muy cerquita de Cours d’Estienne d’Orves, que cuenta con una carta impresionante y una selección de vinos a la altura. Pídete un plato de pescado o una deliciosa pizza elaborada con productos de la región y, para terminar la velada, da un paseo por las pintorescas callejuelas de la zona y contempla las luces reflejadas en las aguas del Puerto Viejo. Este restaurante, todo un clásico atemporal, es uno de los locales imprescindibles de la Provenza.

Estas dos ciudades son célebres por su magnífica gastronomía y no hay mejor sitio para conocerla que en uno de los muchos mercados que se instalan en sus calles al menos una vez a la semana. En Aix-en-Provence, puedes comprar frutas y verduras en los puestos de la Place des Prêcheurs, mientras que en Marsella te esperan la emblemática lonja de pescado del Puerto Viejo y los mercados de Cours Julien, el barrio hípster. Si quieres degustar los sabores más auténticos de la región, reserva mesa en el restaurante Miramar, en Marsella, y prueba la bouillabaisse, una sopa tradicional elaborada con diferentes tipos de pescado.

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- Lucy Norris